viernes, 29 de noviembre de 2013

Un portal de búsqueda de empleo académico

En la época de  Google, Facebook,  Wikipedia, Twitter y los 6  millones de parados, en España  el menguante mercado de trabajo académico carece de  un portal donde poner contacto a empleadores y demandantes de empleo.   La situación es grotesca porque en este aspecto las cosas parecen no haber cambiado mucho desde hace 20 años, cuando me licencié:  ofertas de becas colgadas en tablones de corcho, y boca a boca. En Inglaterra si un recién licenciado quiere hacer una tesis dispone del portal Findaphd.com  que le permite buscar proyectos de tesis por palabras claves o por ubicación geográfica. Lo mismo cabe decir de Francia  y su portal: http://www.intelliagence.fr/Page/Offer/SearchOffer.aspx
 En esos portales los empleadores, es decir, las grupos de investigación que han obtenido fondos, pueden ofertar los puestos.

La existencia de un portal así aliviaría el doble problema que hay en el mercado de trabajo académico en España. Por un lado, facilitar a los grupos de investigación la difusión de sus ofertas. Por el otro, proporcionar a los candidatos una herramienta para practicar el adagio del viejísimo anuncio de detergentes: busque, compare, y si encuentra algo mejor, cómprelo.   El mismo problema existe con los puestos permanentes de investigador y profesor de Universidad, pero aquí la causa del problema no es la dejadez.  Las instituciones no tienen ninguna intención de darle publicidad a sus "openings" porque la mayoría de las veces el candidato ya lo tienen dentro.   Si desde la administración central se quiere impulsar el fin de la endogamia,  harían bien en crear un portal de puestos de trabajo académico y obligar a las Universidades a anunciar allí sus vacantes.

La ausencia de este tipo de herramienta en la web de varias universidades e instituciones ilustra muy bien lo que intento decir. Por ejemplo, el portal de la CRUE, la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas,  sería un lugar obvio para colocar ofertas de empleo académico.   No es aventurado pensar que las 70 universidades españolas tengan unos 50 mil empleados, posiblemente más.  La UA, una universidad mediana, cuenta con casi 3000.    Asumiendo una modesta  una tasa de renovación  de su plantilla de  3 por ciento anual,  deberían dar lugar a  un mínimo de  1500 puestos de trabajo al año, y estoy siendo deliberadamente  conservador en esta estimación.  ¿No justificaría este volumen de puestos la creación de un portal?.    Pero es que a este número hay que sumar  los estudiantes de doctorado. Únicamente entre las 3 universidades con más estudiantes de doctorado en España suman más de diez mil, de acuerdo con el interesante portal de Eroski (!!).

Desde la RSEF vamos a intentar, en la modesta medida de nuestras posibilidades, paliar este problema, creando un portal de búsqueda de empleo académico para  físicos.  Desde este blog, y como una primera semilla de lo que debería ser un empeño más serio, voy a crear una sección de "Ofertas de Empleo académico".   Seguiremos informando.

sábado, 23 de noviembre de 2013

Preservativos de grafeno, algo tangible para De Guindos

Esta semana hemos sabido que la fundación benéfica de Bill Gates, en el contexto de su lucha contra la pobreza,  había planteado una competición de propuestas de investigación para mejorar los preservativos, en particular para minimizar su impacto negativo en la sensación de placer.  La lógica es que la natalidad disparada impide el desarrollo y  la mejora de los preservativos podría ayudar a controlar la natalidad.    Dr Aravind Vijayaraghavan, investigador de la Universidad de Manchester, vinculado al grupo que descubrió el grafeno, ha ganado la competición (100k$) con  su propuesta de  usar grafeno para mejorar los preservativos.   Supongo que  se trata de integrar el grafeno en un composite, para conseguir mantener la resistencia reduciendo el grosor, de igual forma que ya se ha usa el grafeno en material deportivo.

Es absolutamente innegable que una noticia que combina a Gates, condones y grafeno se presta a cachondeo, pero me abstendré, de momento, de poner aquí mis 10 bromas favoritas sobre el tema.  Con 100k$ el equipo de Manchester podrá contratar a un estudiante de doctorado para que trabaje en el tema un par de años. Difícilmente se podrá llegar con este presupuesto a la fase de ensayos con humanos.  Supongo que, de obtener resultados prometedores,  podrán lograr financiación adicional my fácilmente.

En cualquier caso,  como mucho estamos ante el primer paso de un proyecto que puede tardar en cuajar.   Sin embargo, la fundación Gates ya ha conseguido algo muy importante: publicidad baratísima.  ¿Cuánto habría tenido que pagar la Fundación Gates por una campaña de publicidad que lograse el mismo impacto mediático de esta noticia?.  Supongo que mucho más que 100k$.  Así, puede que más adelante todo esto conduzca a la mejora de los preservativos e incluso a la reducción de la pobreza, pero a corto plazo   lo que la Fundación Gates logra con sus 100k$ es una excelente campaña de publicidad.



Por tanto, estamos ante una operación de "public relations" (PR) clásica.  De nuevo la investigación y el PR van de la mano.   Aquí tiene su tangible, señor de De Guindos.  Si España mantiene sus programas de investigación fundamental, se proyecta al mundo como un país avanzado y con futuro.  Si los cancela, estamos generando una campaña de publicidad negativa en la que España es percibida como un país en declive, sin un duro, que no cree en su futuro.

jueves, 14 de noviembre de 2013

Sacando agua de las piedras.

Ya  ha salido la puñetera convocatoria de proyectos del Ministerio, con 11 meses de retraso con respecto al calendario habitual.  Vamos viento en popa a toda vela.  En este panorama, que recuerda  una frase especialmente risible  de Pinochet ("estábamos al borde del abismo, y dimos un paso al frente") hay colegas en España que, pese a todo,  están sacando agua de debajo de las piedras.

A final de agosto la prensa se hizo eco de que Senegal había dado 325k€ al Instituto Universitario  de Enfermedades Tropicales  (Canarias).  Según la noticia,  se estaban realizando además  gestiones  con los gobiernos de "otros países como Guinea Ecuatorial, Cabo Verde, Nigeria y Angola"   para conseguir más financiación.   Me permito sugerir a mis colegas de Canarias que no olviden poner al gobierno de España en esa lista y reflexionar después sobre la marca España.

Durante las mismas fechas, un investigador de la Universidad de Alicante,  el profesor Juan Carlos Sancho, del departamento de Química Física,  conseguía el solito 100k€  de la empresa coreana Samsung para llevar a cabo un proyecto de investigación computacional sobre propiedades electrónicas de materiales orgánicos.  Un vistazo al nombre de las otras universidades que acompañan a la de Alicante en la lista de proyectos de Samsung da una idea del valor de lo conseguido por mi colega y amigo.  Además, el proyecto se podría extender durante 2 años y 200k€ más.   Otro aspecto a destacar, es la velocidad con la que Samsung gestiona su programa de proyectos de investigación: la convocatoria sale en Marzo,  la solicitud de  proyectos se hace en Mayo,  y tras la correspondiente evaluación se informa a los ganadores en Agosto y se empieza en septiembre.

Siguiendo con las hazañas de los investigadores españoles,  tomemos el caso de mi buen amigo Ramón Aguado, investigador del Instituto de Ciencia de Materiales de Madrid, en el CSIC.   Ramón es el investigador principal de un proyecto de investigación del Ministerio que comenzó en 2013,  con una asignación de 7k€ para el primer año, a repartir entre 4 investigadores funcionarios, con el que deberían  comprar equipo, software, asistir a congresos, invitar a colegas a dar seminarios...

La última vez que le pregunté, a mediados de verano, los 7k€ no habían llegado todavía.  Antaño, el CSIC hubiera adelantado el dinero, para permitir al grupo trabajar, pero como quiera que el CSIC está al borde de la quiebra, este año esa solución no era posible.   Además, debido a los problemas presupuestarios, el CSIC impuso restricciones en el horario de calefacción y de aire acondicionado.    En este contexto, a Ramón le acaban de aceptar la publicación de un artículo en Nature y otro en Nature Nanotechnology que son las revistas con más prestigio y en las que casi cualquier científico desea publicar.  Por cierto, que esas revistas cobran más de 1k€ por publicar, o sea que un pico de los 7k€ se puede ir por ahí.

A mis colegas Ramón y Juan Carlos les digo desde aquí que están sacando agua de las piedras y que tienen un mérito, iba a decir incalculable, pero no es cierto. Se puede calcular, en billetes tangibles de los que le gustan a De Guindos, el mérito que tienen.

martes, 5 de noviembre de 2013

MOOCS, caca de caballo y las Universidades Españolas

Cuenta la leyenda, posiblemente falsa,  que a final del siglo XIX había tal preocupación con la acumulación de excrementos de caballo en las calles de Londres que pronosticaron que, para 1950, sus calles estarían cubiertas por 3 metros de dicho material.  Los debates sobre los problemas derivados por los vehículos de tracción animal que pudieran tener lugar en Londres y otras ciudades a final del siglo XIX iban muy pronto a convertirse en obsoletos por la llegada de una tecnología disruptiva, el motor de combustión.

Puede que la caca de caballo y las universidades españolas tengan algo más en común que su escasa reputación.   Mientras en España continúa el muy aburrido debate sobre su mala financiación,  baja calidad y escaso rendimiento,  en Estados Unidos ha nacido  una tecnología que podría cambiar el escenario de la educación de tal forma que tal debate podría ser  tan relevante dentro de 5 o 10 años como el del problema de los excrementos de caballo.

La tecnología en cuestión son los MOOC,  "Massive On-line Open Course", que en español es algo así como Cursos en línea masivos y abiertos.  Así,  Stanford por un lado, y MIT y Harvard por otro, han impulsado sendos  portales (Coursera, EDX) donde ahora se ofrecen decenas de cursos on-line,  que mparten profesores de las mejores universidades del mundo (además de las citadas, Cornell, Caltech, Rice, etc ). Las clases, en forma de video interactivo,  se han de seguir por internet,  con restricciones temporales mucho menores que un curso convencional: los vídeos están disponibles a partir de una fecha,  y se pueden ver en cualquier momento durante la duración del curso.  Para seguir el desarrollo de un curso, es necesario hacer los "deberes", te los corrigen,  te hacen un examen, y en muchos casos incluso te dan un certificado de participación en el curso.   Todo esto gratis total.

Los cursos son seguidos por miles de estudiantes en todo el mundo.  Por ejemplo, en el curso  de introducción a la programación en Python que acabo de terminar, impartido por dos  profesores de la Universidad de Toronto, un total de 7839 estudiantes hemos obtenido el "statement of accomplishment", es decir, hemos tomado el curso y aprobado.  Un total de 66510 estudiantes se inscribió en el curso y vio el primer video y un total de 8600 hizo el examen final. Para poner estos números en contexto, un profesor que lograse dar el mismo curso y aprobar todos los años a 100 alumnos, necesitaría más de 78  años para conseguir llegar a 7839.  Esto nos da una medida, y no es la única,  del aumento de la productividad  que los MOOCs traen consigo.

Los MOOC tienen todas las trazas de una tecnología disruptiva, es decir, una innovación que convierte a otras en obsoleta.  Los vehículos motorizados hicieron eso con los carros de tracción animal, los ordenadores con las máquinas de escribir, y los DVD con los vídeos.  Comparadas con las 100 mejores del Ranking de Shangai, nuestras Universidades ya desempeñan un papel secundario en el ámbito de la investigación. La irrupción de MOOCS "made in US"  podría además  convertir su actividad docente en irrelevante. ¿Qué sentido tiene seguir los cursos impartidos  con un horario rígido por un profesor de la Universidad de tu pueblo si puedes seguir a un profesor de Stanford a través de un MOOC,   sin necesidad de pasar por clase?.