sábado, 27 de julio de 2013

El artículo 20.3 y la mecánica cuántica

La mecánica cuántica es el  conjunto de  leyes que rigen el movimiento de la materia a escala atómica y  es la teoría más exitosa jamás propuesta, en el sentido de que concuerda con algunas observaciones experimentales con una precisión extraordinaria. Cuando se desarrolló, en las primeras décadas del siglo XX,  proporcionó un marco teórico en el que cobraron sentido los extrañísimos  resultados que arrojaban los experimentos  realizados con átomos y electrones. Aquellos experimentos  tenían intrigados y desconcertados  a Planck, Einstein y compañía.

Justo hace 100 años Bohr propuso un modelo para el movimiento de los electrones en el átomo más sencillo de todos, el hidrógeno. El modelo de Bohr  era a las leyes de la física de Newton lo mismo que la obra de los impresionistas a la pintura de Velázquez: una forma radicalmente nueva de ver el mundo.  Después de Bohr llegaron Heisenberg, Schrödinger  y Dirac, que propusieron el marco formal para toda mecánica cuántica, cuya impresionante eficacia a la hora de proporcionar modelos matemáticos que se ajustan a los resultados experimentales venía acompañada de un precio intelectual que horrorizó a casi todos: los conceptos clásicos de posición, velocidad y trayectoria  quedaron desdibujados, y el azar parecía jugar un papel determinante.  Aquello  llevó a Einstein a declarar que esta no podía ser la respuesta final ya que "Dios no juega a los dados".

Viene todo esto a cuento para intentar explicar mi sensación al oir el otro día a Carmen Vela mencionar varias veces el artículo 20.3,  en la mesa redonda de la Bienal de la RSEF.   Tras unos meses intrigado y desconcertado   con el caos del I+D español y sus proyectos secuestrados,  su convocatorias bloqueadas, sus  calendarios incumplidos, sus anuncios sorprendentes en el BOE, el CSIC y otros centros públicos de investigación patas arriba,  el artículo 20.3 podía empezar a aclarar el misterio, como hiciera  el modelo de Bohr con el otro misterio hace 100 años.  Intrigado  fui a preguntar al Oráculo de Mountain View (google) a qué ley pertenece el 20.3. La respuesta:   Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera.  (LOEPSF)

Esta ley, aprobada en Abril de 2012,  define en su preámbulo   3 objetivos:
" Garantizar la sostenibilidad financiera de todas las Administraciones Públicas; fortalecer la confianza en la estabilidad de la economía española; y reforzar el compromiso de España con la Unión Europea en materia de estabilidad presupuestaria. ".
 So far, so good.  Estabilidad,  justo lo que le haría falta a nuestros centros de investigación. En su capítulo III  la  LOEPSF  introduce "novedades legislativas", y entre ellas destacan el siguiente enunciado (también en el preámbulo):   "Todas las Administraciones Públicas deben presentar equilibrio o superávit, sin que puedan incurrir en déficit estructural".

 En el capítulo IV, donde vive nuestro artículo 20.3,  se definen medidas preventivas, correctivas y coercitivas.  El artículo 20.3 resulta ser una "medida correctiva", destinada a las Comunidades Autónomas que no cumplan con el objetivo de déficit que marca la LOEPSF. Dice el 20.3
 "En los supuestos de incumplimiento del objetivo de estabilidad presupuestaria, de deuda pública o de la regla de gasto, la concesión de subvenciones o la suscripción de convenios por parte de la Administración Central con Comunidades Autónomas incumplidoras precisará, con carácter previo a su concesión o suscripción, informe favorable del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas."

Y ésta es la madre del cordero: que a pesar de estar impulsados y legislados por la administración central, muchos de los programas del I+D que están paralizados involucran gasto autonómico y como quiera que algunas Comunidades incumplen con lo establecido en la LOEPSF,  alguien en el ministerio que dirige Montoro debe emitir un informe favorable antes de que se puedan "suscribir los convenios".    Si lo entiendo bien,  Montoro nos tiene agarrados por el 20.3 .   Si no lo entiendo bien, invito a los amables lectores de este blog a que me lo expliquen.

La LOEPSF y su artículo 20.3 permiten quizá dar cuenta de los misteriosos hechos,   ya saben: proyectos paralizados y secuestrados,  convocatorias retenidas, y el CSIC  convertido en un soviet.  Pero, al igual que le pasara a Einstein con la física cuántica, aunque  en la medida de mis muy modestas prestaciones,  la LOEPSF me causa un gran horror intelectual.   ¿Cómo hemos llegado a crear un engendro así, en el que la deuda de una región paraliza la acción de la administración central? ¿ Cómo puede una ley cuyo objetivo es "garantizar la sostenibilidad financiera de todas las instituciones del estado", acabar estrangulándolas?.  ¿Es un homenaje al doublespeak de Orwell o es que nos hemos vuelto más idiotas?.  ¿Estamos liquidando nuestro adolescente sistema de I+D en el altar de la pertenencia a la UE y al euro?   ¿Hay alguien que "mande" aquí o es nuestra administración un monstruo de 4 cabezas,  europea, central, regional y local,  peleadas entre si?.

Por último, de haber voluntad y dinero,  en el Ministerio de Montoro  podrían emitir en 10 minutos un informe que desbloquee los programas del I+D.   Dinero sabemos que hay poco, pero empiezo a pensar  que igual ese no es el  principal problema.

domingo, 21 de julio de 2013

Carmen Vela en la bienal de la RSEF

Carmen Vela (CV), Secretaria de Estado del I+D,  respondió durante más de una hora a preguntas formuladas de un público formado por los más de  400 físicos que participaron en la trigésimo cuarta reunión Bienal de la Real Sociedad Española de Física (RSEF), que tuvo lugar en Valencia la semana pasada.    Durante la  mesa redonda sobre política científica prevista en el programa, el jueves 18 de Julio,   al filo del mediodía,   CV hizo frente al ambiente  expectante, y por  momentos tenso,  propiciado por la situación crítica del I+D  descrita  en entradas anteriores.

 Mesa redonda sobre política científica,  Valencia, 18-7-2013.
No faltaban en el público investigadores del CSIC preocupados y afectados por el corralito,  investigadores con  proyectos de 2013 concedidos y secuestrados, y otros tantos a la expectativa de una convocatoria de 2014 que acumula  7 meses de retraso,  investigadores a la espera de la resolución de la convocatoria del programa Juan de la Cierva, además de  jóvenes investigadores afectados por decisiones en ocasiones ajenas a la Secretaría de Estado de I+D, como  subidas de tasas de master y bloqueo de convocatorias de becas del Ministerio de Educación, pero que afectan igualmente.

El acto se inició con una breve presentación por parte del  vicepresidente de la RSEF Adolfo Azcárraga,  que al día siguiente resultó además ganador de las elecciones a presidente de la RSEF.    Azcárraga, desgranó en 3 transparencias el impacto enorme de la Física en la economía europea, para seguir con las cifras menguantes del I+D español y terminar con un  resumen de los problemas críticos que nos acucian: paralización del Plan I+D del 2013, fuga de cerebros, inseguridad en la continuidad de proyectos, corralitos, supervivencia del CSIC, incumplimiento de compromisos internacionales.

De izquierda a derecha:  Labastida, Figueras,  Azcárraga, Carmen Vela. Al fondo, la transparencia de Azcárraga. 

Tras las intervenciones de Labastida y Figueras,  Carmen Vela dio la palabra al público, no sin antes matizar algunas afirmaciones de los otros participantes de la mesa.  Uno de los temas recurrentes en las preguntas e intervenciones por parte de los investigadores fue la destrucción en unos pocos años, por una crisis que todos queremos creer coyuntural,  de un ecosistema  que ha llevado varias décadas poner en marcha.   Se preguntó por el perjuicio de la marca España propiciada por los impagos, se expresó reiteradamente el impacto negativo que tendrán durante años los recortes que se están llevando a cabo ahora, se comentó el futuro del CSIC.

Carmen Vela mostró una gran habilidad para navegar en esta tormenta haciendo uso de grandes dosis de empatía, habilidad dialéctica y conocimiento del tema.   Temas recurrentes en sus respuestas fueron su determinación de pelear por el I+D, de "dejarse la piel",  y las  dificultades  a la hora de poner en marcha las convocatorias habituales  debidas   al artículo 20.3 (de la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera),  que por lo visto entorpece o incluso paraliza iniciativas de ámbito estatal que involucran comunidades autónomas que superan el límite previsto de déficit.   CV   prometió  que  el CSIC tendrá los fondos que le hacen falta,  que la convocatoria de los proyectos de 2014 saldrá (se rumorea que en Septiembre) y reiteró que la mala prensa en foros internacionales no nos conviene.
El catedrático José Bernabeu a Carmen Vela: "no nos cabe duda de que te estás dejando la piel, pero ese no es el punto".  
Quizá el sentir de muchos de los presentes fue resumido en  el que para mi fue uno de los grandes momentos del evento,  cuando el catedrático de Física de la Universidad de Valencia,  José Bernabeu, inició  su intervención diciendo "Carmen,  no nos cabe duda de que te  estás dejando la piel, pero ese no es el punto".   El punto, creen muchos, es que si a pesar de todo el esfuerzo y la buena voluntad, las condiciones hacen imposible una gestión normalizada, aunque sea con recortes, de las convocatorias del I+D, lo que debería hacer la Secretaria de Estado es dimitir, para denunciar así la situación.

A falta de una opinión clara sobre esto último,  me gustaría destacar 3 cosas:
1) La valentía de Carmen Vela al  dar la cara  ante un público que está siendo víctima del bloqueo de los programas que ella gestiona.
2) La utilidad de la RSEF en general, y su encuentro bianual en particular, para propiciar un encuentro que sirvió para que algunos nos informásemos mejor sobre los entresijos de la grave situación que atravesamos y para que las autoridades (vicepresidente del CSIC, Secretaria de Estado) vieran de primera mano el estado de ánimo de la tropa.
3) El escaso precio político  que tienen que pagar los responsables últimos, sentados en el consejo de ministros, del daño infligido sobre el I+D español. Como dijo Azcárraga, es probable que los científicos tengamos que hacer un esfuerzo para trasladar a la sociedad la importancia de nuestro trabajo, algo que suscribo plenamente y que este blog intenta paliar.


jueves, 11 de julio de 2013

Hacer todo lo necesario para mantener el CSIC

Carmen Vela, Secretaria de Estado de I+D, anuncia que hará todo lo necesario para mantener el CSIC.  Estas sorprendentes declaraciones llegan 2 días después de las de su presidente,  Emilio Lora Tamayo,  diciendo que el CSIC está en una "situación límite" y que necesitan un traspaso de 75 M€ para evitar un "cataclismo".  Todo esto ocurre semanas después del anuncio por parte del ministro de Economía y Competitividad,  en el parlamento, de que se iban a liberar 100M€ para partidas del I+D.   La  noticia vino acompañada con  declaraciones a EFE de "fuentes del gobierno" de que "no van a dejar caer al CSIC", pero parece que no ha venido acompañada del prometido traspaso de 100M€.  

El "no dejar caer al CSIC" viene del mismo ministerio que  se dedica a no dejar caer a Bankia.   Esto nos ha costado a los contribuyentes 19 mil millones de euros.  O sea, 190 veces la partida que graciosamente anunció el ministro para insuflar un poco de aire al I+D español.  Lo de Bankia, y tantas otras cosas, pone en evidencia  que  75M€ son el puñetero chocolate del loro.  En su momento el gobierno de España opinó que 150M€ eran insuficientes para compensar a los productores de pepinos de Murcia, cuando la crisis del e-coli.  Lo que nos pasa a los científicos españoles es que cuando nos sacan del laboratorio somos una panda de pardillos,  y nos vendemos más baratos que los productores de pepinos de Murcia.   Si a Bárcenas le diera por ahí,  podría casi él  solito,  con sus cuentas de Suiza, inyectarle dinero al CSIC para evitar el "cataclismo", que me temo que es el eufemismo elegido por su presidente para referirse al impago de las nóminas.  

En este contexto, lo que ya me parece absolutamente de aurora boreal es que la señora  Carmen Vela  haya dicho lo siguiente:    "Es difícil nuestra situación, como la de todos los sectores en España, pero no por eso debemos llevar fuera una situación que siendo difícil, pintan como catastrófica y en la que parece que no merece la pena que nadie ponga dinero o que nadie invierta en España”", en alusión a cartas de protesta publicadas en  Nature y Science.   Fue la  Secretaria de Estado quien  publicó una carta en  Nature   hablando de su visión del I+D, que aludía a un exceso de científicos en España.   ¿Qué pretende?. ¿Que la respuesta la publiquemos en  periódicos de provincias?. 

Que la Secretaria de Estado  nos pida discreción a las víctimas de la absoluta falta de sensibilidad y visión de futuro que está mostrando este gobierno con el I+D  figura en el mismo nivel moral que las peticiones de silencio a las víctimas el terrorismo, o de perdón cristiano de la mujer maltratada al marido maltratador.    Basta ya de declaraciones, de consejos y de promesas. Para mantener al CSIC no hay más que pagar lo que está previsto en los presupuestos generales del Estado. Si esto es un problema, que lo digan, y así sabremos si es que estamos al borde del colapso o lo que pasa es que este gobierno quiere darle la vuelta al reloj de la historia y  volver a la España negra de los burros y los botijos.

PS:  Me uno aquí a la petición de firmas para salvar el CSIC:
https://www.change.org/es/peticiones/firma-para-salvar-al-csic